domingo, 14 de diciembre de 2008

Nada

Es difícil definir la "nada"; utilizando la Lógica es casi [casi] imposible. No buscaré determinar un concepto la "nada". Aunque puedo afirmar que al no poder definir la "nada" se llega a la angustia; pero no toda la angustia implica la "nada".

martes, 2 de diciembre de 2008

What the hell is the love?

¿Qué diablos es el amor? ¿Qué carajo es el amor? o simplemente: ¿Qué es el amor?

  • Un sentimiento [?]
  • Una abstracción [?]
  • Una creación del ser humano [?]
  • Algo que en realidad no existe [?]
¿Cómo puedo saber que el amor existe? ¿El amor se puede medir? ¿Cuantificar de alguna manera? O simplemente no se puede conocer el amor en su totalidad, solamente parcialmente [?].
Honestamente en éste momento no tengo las respuestas [ver título de éste blog]. Sin embargo las personas que estén leyendo éste post pueden llegar a obtener una respuesta posiblemente definitiva a cada pregunta.

lunes, 10 de noviembre de 2008

Siete notas

Cuatro flemas
que agravan la voz,
seis cristales
que huelen a alcohol,
el ensayo
que no pude empezar,
la condena
que me hizo llorar…

Con un tipo
que blasfema en latín,
le hacen coro
los amigos sin swing
y una trampa
en la que caí […]

viernes, 24 de octubre de 2008

Sobre algún final

Si somos observadores nos daremos cuenta que muchas cosas (importantes o no) están por llegar a su fin. Faltan pocas horas para que el día, en el que ustedes estén leyendo este texto, termine. Faltan unas semanas para que el año 2008 se acabe. Si el ser humano sigue derrochando el agua potable de nuestro planeta ésta se acabará en unas décadas o tal vez menos [para ése caso hay que buscar algunas páginas web y publicaciones especializadas en el tema]. No sé exactamente cuándo se agotará el petróleo; pero sé que no será sino hasta unos cientos de años. No sé cuánto tiempo soportará nuestro planeta las consecuencias del calentamiento global. No sé cuánto tiempo tardarán, ustedes lectores, en desesperarse al mencionar que “no sé” muchas cosas; generando una angustia similar a la que siente el hombre actualmente al preguntarse “¿Por qué el hombre llegó al panorama de su propia destrucción?” Posiblemente lleguemos a comprender el por qué de la angustia actual del hombre desde un punto de vista filosófico. Para ello necesitamos revisar de manera breve los periodos de la Filosofía y algunas características generales:

  • Periodo griego. El Asombro ante lo que es impulsa el pensar. El fundamento de ese pensar griego llega con la sustancia aristotélica.
  • Periodo Medieval. El Temor hacia un ser supremo impulsa el pensar. Dios es el fundamento del pensar. Sólo los teólogos de la Iglesia hicieron filosofía. Las iglesias inventan las universidades.
  • Periodo Moderno. La Duda anímica como incertidumbre impulsa el pensar. El sujeto es el fundamento racional del pensar.
Es necesario señalar que la Filosofía se caracteriza por ser racional. Los estados de ánimo no son racionales. Por lo tanto, lo que ha motivado la razón filosófica (asombro, temor, duda) es algo irracional. Lo que está detrás de la lógica son los estados de ánimo. Y a su vez, la lógica va a regir el pensar racional.
  • Periodo Contemporáneo. La Angustia impulsa el pensar [?]. Hoy no hay fundamento en la Filosofía; es el Abismo [?].

¿Qué relación tiene la destrucción del hombre con el hecho de que aparentemente no exista un fundamento en la Filosofía de la actualidad? La Filosofía es un asunto humano, los animales no hacen filosofía, Dios no hace filosofía. El filosofar es únicamente humano; por ello, la Filosofía se encuentra en toda actividad humana.

Para occidente hacer filosofía es fundamentar. Fundamentar es igual a Pensar; y el Pensar está delimitado por lo impensable.


De igual forma, Pensar y Ser, comparten una misma estructura.


Entonces, si el hombre occidental no encuentra un fundamento lógico para la Filosofía Contemporánea, y al ser la angustia lo que impulsa el pensar; entraremos en conflicto con la propia esencia del hombre. Tarde o temprano la Filosofía junto con el hombre llegarán a su final.

martes, 21 de octubre de 2008

Desatormentándome

-¿Por qué te sigues negando? ¿Acaso no entiendes? ¿De que te sirve la razón, tu conciencia y demás elementos que conoces? Deja de hacer “eso”. ¡Suficiente! ¡Basta! No sigas, todo esto te llevará a “nada”.

-¿Y qué es la nada? Defínela. Si hablas de la nada posiblemente puedas definirla… o tal vez no.

-La nada no es una negación. Tomemos como referencia la palabra nada en inglés: nothing/no-cosa. La nada no es la no cosa. Eso me angustia, muchas personas usamos la palabra nada.

-Angustia… ¿De qué te angustias? No va a suceder algo desastroso por la palabra nada. No va a suceder nada.

-No se de qué me angustio, pues de saberlo, este sentimiento dejaría de ser angustia. La angustia es provocada por lo desconocido.

-¡Ja! Eres ridículo.

-No lo soy. Además tú eres el menos indicado para decirme eso.

-Si eso es verdad, entonces ¿quién es la persona indicada para señalar tus características? ¿Acaso hay alguien que sea maestro en eso?

-No lo sé.

-¡Vaya! ¡Vaya! Y ahora ¿Quién es él de las negaciones?

-Yo…

-Lo sabía.

-No es verdad, tú no lo sabías sino hasta el momento en que te lo dije. No podrías saberlo antes de que te respondiera; mucho menos adivinarlo.

-Entonces lo intuí…

-Si. Y no es necesaria una explicación para ello.

-¿Por qué no?

-Ya he hablado en distintas ocasiones sobre la intuición, lo dado a la intuición…

-Los aspectos…

-La conciencia, la intencionalidad…

-¡Suficiente! No quiero padecer insomnio esta noche.

-¿No quieres? Pues deja de conversar conmigo ¡Vampiro!

-¡Déjame dormir tranquilo!

-Aléjate de mis emociones vampiro porque ya no resisto más…

-Y aléjate de mis tentaciones porque este cuerpo es mío, nada más…

-¡No sigas! Porque ya me cansé de gritar…

-¿Por Cris?

-No, me cansé de que, en lugar de cantar, solamente grite.

-¿Por Cris?

-¡No! Yo no grito por Cris, eso no viene al caso.

-Nuevamente las negaciones.

-Si, no puedo concebir un mundo sin las negaciones…

-De ser así no habría equilibrio.

-¿A qué diablos te refieres?

-Al equilibrio: bueno/malo, blanco/negro…

-¡Patrañas! Yo solamente me refiero a que si hay un mundo de ideas o esencias de lo bueno, lo hermoso, lo justo; habría también ideas para lo malo, lo feo y lo injusto.

-¿Por qué me tratas tan mal?

-¿Qué?

-¿Por qué me tratas tan bien?

-Deja de hacer eso. Ser referencial en todo momento desespera. Evita forzar tus conversaciones con tus malditas referencias.

-¡No quiero!

-Aunque no quieras, dejarás de hacer tus estúpidas referencias.

-Si lo dices de esa manera… tampoco te voy a obedecer.

-Tendrás que hacerlo y punto; no pienso seguir discutiendo contigo.

-¿Estábamos discutiendo?

-Obviamente…y también limítate al usar tu sarcasmo.

-Pero si eso nos da mucha gracia.

-No siempre…

-Ya me aburrí.

-Pues vete y haz otra cosa; escucha música, cántala, grítala; lee libros, analízalos; haz cualquier cosa que te entretenga.

-De la manera en que lo dices mi aburrimiento aumenta.

-Entonces sólo vete de aquí.

-¿En verdad me puedo ir ya? Pensé que me cuestionarías lo que pienso, lo que hago, lo que me gusta. Sentí que querías moverme el tapete, desestabilizar la nave de cristal en la que a veces me encuentro.

-¿Para qué? Por ahora estoy cansado y tranquilo. Lo que menos necesitamos es una parodia de ello/yo/súper-yo; porque todavía nos falta entender muchas cosas al respecto. Tampoco quiero parecer la voz de la verdad. No quiero interpretar el estereotípico papel de la conciencia estilo “Pepe Grillo”. Ni quiero hacerte pensar que tu vida es una tragedia; porque no lo es. Incluso ya me parece innecesario repetírtelo. Sabes que eres lo suficientemente consiente como para no suicidarte…

-Al imaginar y pensar en el suicidio, me parece algo absurdo y estúpido. Sin embargo no me burlo de ello.

-Por último ¿A quién quieres impresionar?

-A nadie.

-¿Seguro?

-Sí, no tengo a quién impresionar.

-¿A nadie?

-A nadie. No me sirve de mucho impresionar a una persona.

-Y si no quieres impresionar a nadie ¿Por qué cometes estas temeridades?

-¿Te refieres a nuestras conversaciones?

-Precisamente.

-Tienes razón, cada conversación parece una temeridad, respecto al motivo para realizarlas. Aún así yo no determinaré si nuestras conversaciones son actos de temeridad; que lo definan otros.

-Si así lo deseas…

-Es necesario detener esta charla, antes de que cada cosa que digamos se vuelva un cliché…

-Y un diálogo forzado, más forzado de lo que es ya en este instante.

-Si.

-De acuerdo, que pases buena noche…

-O buen día…

-O buena tarde…

-O lo que sea.

-Hasta luego.

domingo, 19 de octubre de 2008

Influencia

Actualmente sufro de una "Crisis de Creatividad". No puedo escribir un texto, ni dibujar, ni expresar algo sin remitirme a alguna imagen, sonido o frase previa; como si fueran un motor involuntario de la creatividad. Dirían algunos aristotélicos que, la intuición no sale de la nada, tiene su base a través de las vivencias previas; y a su vez, todo concepto tiene base en la intuición y sin intuición no hay concepto. La acción que impulsa la imaginación es la intuición. Si bien cualquier persona puede imitar las creaciones y a los creadores; también se debe aportar algo propio para comenzar a salir de aquello que nos influecia, hay que "dejarlas partir".