domingo, 17 de abril de 2011

Medianoche de Sábado-Domingo

El frío de la noche me cobija y escucho a los gatos gemir en su ritual que perturba a los perros; canes noctámbulos que aullan al compás de las sirenas del desorden público. Mientras, la sal de mis lágrimas derrite el granizo poco a poco.

4 comentarios:

  1. ¡Qué lindo texto!
    Me gusta la imagen de las lágrimas derritiendo el granizo.

    Saludos.

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  2. claaro, el fin del domino era ese. aunque también lo relaciono con algo industrial, maximizado, universal y eso me gusta.

    me encanta la noche, por eso estoy hasta tarde haciendo mis cosas y siempre escucho todo tipo de animales... mientras el llanto conjugado de una manera particular aleja los témpanos de mi.

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  3. Bien escrito. Los perros que suelo escuchar le ladran también a los ciclistas, a veces juegan con botellas de plastico, haciendo ruido.
    Mi estado de animo es algo sombrio, aunque tengo a veces buenos momentos.

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  4. pero la sal mantiene el hielo como tal...congelado :p

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